La relación de las empresas con la sociedad tiene que evolucionar. Los productos y servicios han sido el principal nexo de unión con las personas, con mas o menos atributos funcionales o emocionales. Sin embargo, existe una nueva sensibilidad social, y esperan algo más que una simple experiencia comercial.
Las empresas afirman que su misión es mejorar la vida de las personas. Lo podemos ver en miles de informes anuales que nadie lee. Detrás de esta histórica frase existe la convicción de que se consigue a través de la excelencia de sus productos, satisfaciendo una necesidad del consumidor.
Pero en realidad las empresas tienen un enorme potencial para conseguir que esta promesa sea verdadera.
Las empresas son un agente social activo, dinámico, generador de riqueza y empleo, de la que muchas familias obtienen lo necesario para tener una calidad de vida digna. Tiene la verdadera capacidad de transformar el mundo que le rodea.
En estos momentos de incertidumbre existe otros conceptos y valores que la sociedad necesita recibir para , de verdad, mejorar su bienestar.
Todos hemos vivido la importancia de recibir un abrazo, un apoyo, unas palabras de ánimo, sentir que los amigos están ahí para siempre y que el futuro está lleno de oportunidades.
Pues ahí reside la fuerza. Tener la iniciativa de invitarlos para compartir tu actividad, como haces las cosas, como cuidas a tu gente y al planeta, tus esfuerzos en seguridad y prevención, tu compromiso con la comunidad, tus acciones sociales y tus planes de futuro. Abrir tu puertas y tu corazón es un acto de conexión emocional con las personas. Demuéstralo con hechos, que vean, que respiren, que toquen. Si consigues que te conozcan mejor y te valorarán mas.
Transmitir confianza y reconocimiento genera tranquilidad y optimismo a la comunidad y a sus familias. Tener la capacidad de influir en el ánimo de las personas, cambiar su percepción de la situación es un superpoder mágico para transformar el mundo, que las empresas deben utilizar.
Esto si que es mejorar la vida de las personas.
Ahora es el momento para revisar el relato que tu empresa esta transmitiendo, para actualizarlo a los nuevos valores y expectativas que esperan de vosotros.
Ser proactivos, asumir riesgos, tomar la iniciativa es lo que significa ser empresa. No podemos ser pasivos y esperar a que la situación cambie por la acción de los demás.
Si hay momentos en que el mundo empresarial debe liderar y conectar con la sociedad, este es uno de ellos.
Las empresas somos mucho mas que fabricantes, distribuidores o vendedores. Somos el agente creador de riqueza y progreso. Solo tenemos que recordarlo, salir de la zona de confort y ponernos en marcha para liderar los cambios que van a suceder.
Vamos a necesitar mucha creatividad y recursos para completar esta tarea.
¿Estás dispuesto a repartir abrazos?
